domingo, 19 de marzo de 2023

GASPARO DA SALÒ




Gasparo da Salò, también conocido como Gasparo Bertolotti, fue un famoso lutier italiano del siglo XVI. Nació en la ciudad de Salò, ubicada en la región de Lombardía, al norte de Italia, alrededor del año 1540. Gasparo da Salò es especialmente conocido por ser uno de los primeros lutieres en fabricar instrumentos de cuerda con una calidad y un sonido excepcionales.

Existe un muy detallado registro histórico (cerca de 100 documentos y aproximadamente 80 instrumentos originales).

Gasparo da Salò construyó principalmente violines, violas y violonchelos, y algún contrabajo,   sus instrumentos eran muy valorados por los músicos de la época, tanto por su calidad de sonido como por su belleza estética. Se dice que sus violines son particularmente notables por su tono brillante y fuerte, y su habilidad para producir sonidos expresivos y emocionales.

Su abuelo Santino, dueño de tierras y rebaños, probablemente fabricante de cuerdas de instrumentos musicales, se mudó de Polpenazze del Garda a Salò, capital de la Riviera del Garda, para brindarle más oportunidades a su familia. El ámbito artístico y musical en Salò era muy abundante y efervescente. Gasparo es hijo y sobrino de dos hermanos músicos, instrumentistas y compositores del más alto nivel profesional, Francesco y Agostino di Bertolotti, suficientemente especializados como para ser llamados en documentos los «violì», o incluso en la forma extendida, para evitar dudas, los «violini».1​


Su tío Agostino además de ser un experto en instrumentos musicales, se convertiría en el primer maestro de capilla de Salò, y su hijo Bernardino, primo de Gasparo, llegó a ser un virtuoso músico (violinista y trombonista) trabajando antes en Ferrara en la impactante corte musical de Este, luego en Mantua junto a Vincenzo I Gonzaga durante la presencia de Monteverdi, y después en Roma como «músico de Su Santidad el Papa en el Castillo Sant'Angelo».


La educación musical de Gasparo, del más alto nivel, aconteció en la vida familiar, así como siguiendo los pasos de los liristas y violeros de Salò activos en la Basílica de San Marcos en Venecia, y los de los violinistas de Brescia activos también en Venecia y en las cortes europeas de principios de 1540 hasta finales de siglo. Además su educación interpretativo-musical, probablemente alcanzada por emulación de los padres y acompañando al dúo de violinistas de la familia, debió de ser bastante fuerte, como testimonia el hecho de que en un documento fechado en Bergamo en 1604, con respecto a la música en Santa Maria Maggiore, se le cita como virtuoso violinista.

Cuando su padre muere, alrededor de 1562, se muda a Brescia. Alquila inmediatamente una casa con taller en la Contrada degli Antegnati, centro de la vida musical, por la presencia de la famosa dinastía de fabricantes de órganos y otros poliinstrumentistas talentosos en la Seconda Quadra di San Giovanni, frente al Palazzo Vecchio del Podestà (actual Via Cairoli), casándose pronto. La posibilidad de alquilar casi inmediatamente una casa con taller, a pesar de las pocas posibilidades derivadas de la división de la herencia, pequeña debido al número de hermanos y hermanas, testimonia muy probablemente una gran habilidad para fabricar cuerdas, como indica también el hecho de que, tres años después, el trabajo y las ganancias le permitieron desposar a Isabetta Cassetti, hija de un alfarero y vidriero. Además de eso, mantuvo amistades y participaciones con razones artísticas profesionales como Girolamo Virchi, uno de los artesanos-artistas más prominentes de la ciudad, definido en el documento de 1563 «maestro de musica instrumentis», quien en 1565 sería padrino de Francesco, hijo de Gasparo, el primero de otros seis, tres varones llamados Marcantonio, de los cuales dos murieron casi inmediatamente, y tres hijas.


Además, en ese barrio vivieron dos organistas muy famosos de la Catedral de Brescia, Fiorenzo Mascara y su sucesor Constanzo Antegnati, y un muy buen violinista, Giuseppe Biagini. Como muchos otros poliinstrumentistas de Brescia, Mascara fue también un excelente violgambista.

Gasparo da Salò también fue un innovador en el diseño y la construcción de instrumentos de cuerda, y es considerado uno de los primeros lutieres en crear violines con cuatro cuerdas en lugar de las tres cuerdas utilizadas en la época medieval. También se le atribuye la invención del puente de violín en forma de arco, que todavía se utiliza en la construcción de violines y otros instrumentos de cuerda.

A pesar de que Gasparo da Salò vivió hace muchos siglos, su legado como uno de los más importantes fabricantes de instrumentos de cuerda de la historia sigue vivo hoy en día, y sus instrumentos son muy valorados y buscados por músicos y coleccionistas de todo el mundo.